Las costumbres de un pueblo son conocidos como las fiestas patronales o formas de comportamiento en el que puede ser consideradas a corto o a largo plazo dependiendo de la importancia de las personas que habitan en la sociedad le vayan dando. Las tradiciones son acervos de bienes en el que se transmiten de generación a generaciones nuevas en el que el legado que se les van dejando no se vaya perdiendo.
LOS DIABLOS DE TELOLOAPAN, GUERRERO
En este caso hablaremos de un de las
costumbre y tradiciones de la región norte del estado de guerrero, Teloloapan,
gro es una de las comunidades conocidas por
una de las bellas tradiciones que posee. En este caso la tradición que más
se ejerce es la de los diablos de
Teloloapan que es conocida por la mayor parte de guerrero y México por su magnífica mascara que por ser
muy atractiva por las personas, tiene una historia que la convertiría en una de
las tradiciones conocidas solo por las máscaras pero muchas de las personas
realmente no conocen su historia.
Los Diablos de Teloloapan no son como
los típicos personajes diabólicos, representantes del pecado y del mal. Estos
son diablos patrióticos, dado que tuvo su origen entre 1818 y 1821, durante la
última etapa de la Guerra de Independencia. Después de 8 largos años de lucha
contra los españoles, ya los insurgentes habían sido derrotados en varios
estados de lo que se convertiría en la República Mexicana. Según la tradición, los diablos de
Teloloapan tuvieron origen patriótico, en la guerra de Independencia, relevante
en el estado de Guerrero, ya que a siete kilómetros se encuentra Acatempan,
población donde se encontraron el jefe del ejército insurgente, Vicente
Guerrero,
Cuenta que a uno de los seguidores de
Ascencio, José Atanasio, oriundo de Tierra Caliente, en una de sus ocurrencias
se puso la cuera que usan en su región para protegerse de los arbustos
espinosos, y una máscara que talló en madera y decoró con cuernos de toro y
crines de caballo. Completó su espantoso atuendo con un chicote tejido por él
mismo y así se divirtió con sus compañeros de batalla en un momento de descanso.
Tomaron sus chicotes de ixtle y,
produciendo ruidos espantosos, hicieron su aparición de noche desde las cuevas
de los alrededores de Teloloapan. Los españoles, temerosos y supersticiosos
pensaron que eran demonios del mismísimo infierno y se espantaron tanto que
huyeron sin más, dejando sus armas y parque. Esta estrategia de guerra les
sirvió a los insurgentes varias veces durante sus enfrentamientos con el
enemigo en la región Norte de Guerrero.
Así, una noche, la aparición repentina
de los diablos distribuidos por el pueblo sorprendió y asustó a los guardias
enemigos, quienes cayeron bajo las balas de los insurgentes y éstos pudieron
romper el cerco. Después de celebrar el triunfo en la
plaza de Teloloapan, los “diablos” regalaron sus máscaras a los jóvenes del
pueblo, quienes cada año recordaron el acontecimiento el día del inicio del
movimiento de Independencia.
Don Fidel de la Puente Fabián, quien
fue el encargado de la tradición, dándose a conocer como mascarero a nivel
mundial durante 55 años, desde 1945 hasta que falleció en el año 2001.
Prácticamente huérfano, Don Fidel creció en las calles, donde aprendió a luchar
para sobrevivir, y adquirió habilidades que le ayudaron a domar y controlar a
los feroces diablos, juntándolos en una sola banda que llegó a ser el orgullo e
identidad de los teloloapenses.
Dedicó diez años de su vida de tiempo
completo a la difusión de la tradición que amaba, acompañando a sus máscaras en
exhibiciones dentro y fuera de la República Mexicana.
Don Fidel dejó la
tradición de los diablos de herencia a su hijo, Fidel de la Puente Basabe Igual
que su padre ha apoyado en la difusión de los diablos, logrando su participación
en desfiles en Chilpancingo, Acapulco, Iguala, Arcelia, Taxco y notablemente en
eventos patrocinados por asociaciones de teloloapenses radicados en la Ciudad
de México.
Las máscaras de diablos de Teloloapan se encuentran
entre coleccionistas y museos de varios lugares de México y del mundo. Máscaras
que salieron por decenas de las manos hábiles de don Fidel para asombrar
deleitando a mucha gente, a quien nunca se negó a venderlas: “Las máscaras las
hago yo” –decía–, “el dinero no”. Los tronidos de sus chicotes se escuchan por
las calles y los niños huyen al paso de las criaturas forradas de cuero y con
cabezas llenas de otras cabezas animales, de cuernos encimados, de greñudas
crines y agudos colmillos... cabezas llenas de la fantasía colorida de este
desconcertante México.Entre bramidos y bufidos corre por las calles la manada
de diablos aterrorizando con sus descomunales máscaras. Los tronidos de sus
chicotes se escuchan por las calles y los niños huyen al paso de las criaturas
forradas de cuero y con cabezas llenas de otras cabezas animales, de cuernos
encimados, de greñudas crines y agudos colmillos, cabezas llenas de la fantasía
colorida de este desconcertante México.
El 16 de septiembre de cada año las calles de
Teloloapan, Guerrero, se llenan de diablos que acompañados por la euforia
cumplen con la costumbre anual de participar en el concurso donde han de lucir
sus trajes y su habilidad para tronar en el aire los largos chicotes, con
movimientos rápidos adelante y atrás, y hasta hincados o “con la zurda”. Frente al
palacio municipal los diablos desfilan, entre 20 y 30 actualmente, y los jueces
califican el atuendo para premiar al más original y vistoso.
La cuera, prenda de cuero de venado curtido
que cubre el cuerpo completamente, es la base del vistoso traje que llega a
costar hasta 15 000 pesos. Una piel de animal que cubre la espalda, guantes
gruesos y botas son el complemento, pero todo lo opaca la espantosamente bella
máscara de madera de colorín, hasta 20 kg de peso y 80 cm de altura, con
cuernos y muchas figuras talladas en la misma madera que sobresalen y la
saturan al máximo: serpientes, cabezas humanas, fauces de felino.
Toda esta informacion fue recabada en una investigacion de campo lo cual se llevo acabo en un largo tiempo, tomando distintas muestras el principal fue su hijo Fidel de la Puente Basabe y personas que trabajaron con su padre.
Harrah's Lake Tahoe Casino & Hotel - Mapyro
ResponderEliminarFind 포천 출장마사지 Harrah's Lake Tahoe Casino & Hotel (Stateline) location 안양 출장마사지 in 천안 출장안마 Stateline, NV, United States and 익산 출장마사지 2091 춘천 출장안마 other nearby airports.